Gatos desididos.

No vale la pena molestarse, no no, no lo vale.

Puedes gritar, llorar, patalear, reclamar y comportarte como gustes.

Para el gatin que lea esto, le pido una disculpa, a estas alturas he comprendido una cosa: soy demasiado fácil de leer, porque soy muy expresiva.

No temo decir que quiero a las personas, porque hay muy pocas que se han ganado mi amor, las puedo contar con una mano y sobraran deditos. Por eso mismo defenderé mi cariño hasta las últimas consecuencias, sólo porque quiero un montonal a esa persona, sólo por eso.

Lo que nos a llevado a esta situación. Me siento mal porque la situación en si, al gato es al que más afecta. Pero no retrocederé resulta que he elegido mi camino y no puedo sólo darme la vuelta y ya, no más, no seré condescendiente con eso.

No sólo he confirmado lo que ya he venido diciendo en varios trabajos:

El amor es y será el arma más poderosa de todos los tiempos. Casi empatando con la belleza.

En toda gran historia (y en las no tan grandes) encontramos una belleza que mueve sentimientos y deseos. Pero si no hay amor, no hay historia, el amor puede ser reflejado hacia cualquier cosa, pero siempre será el amor el que mueva las cosas.

 De mi trabajo de Orlando Furioso.

Y también esta esta otra:

La vida de Dante siempre tuvo un solo enfoque, siempre vio hacia una sola dirección, su amor fue tan devoto que rayó en la obsesión, pero todos necesitamos de una obsesión en la vida, se dice que el hombre es sus actos, pero como yo lo veo, el hombre es sus excesos.

De mi trabajo de La vida nueva de Dante Alighieri.

Y creo que es la verdad, firmemente, los excesos de amor, dominan al mundo y por eso pierde su rumbo (eso rimo ¬.¬)  

Yo sabía que sería un obstaculo para que olvidara su pasado, ya que vivo con el día a día, pero, me quedaré en el lugar en el que estoy hasta que él me permita.

La entrada 18: llena de desición.